top of page
Foto del escritorFernanda Ávila

¿Azul, o rojo?, ¿burros o elefantes?, ¿demócratas o republicanos?

Actualizado: 23 oct 2020

Hace una semana, no se realizó ningún evento debido a que Trump se contagió de covid-19 y era muy pronto para un acercamiento como el planeado. Así que, tanto Joe como Donald, tuvieron sus mítines por separado, cada quién en un estado diferente, pero eso no nos dice mucho. Nada como un buen encuentro para debatir y echarle en cara al oponente sus fallos y errores durante su carrera política, ¿no?


Anoche tuvimos el último debate entre el presidente Trump y el ex vicepresidente Biden. La verdad es que nadie esperaba este tipo de evento… pero a la vez, sí. Toda América – y todo el planeta –, quería ver por fin un encuentro donde los participantes no solo se estuvieran gritando y peleando, sino también una postura profesional que reflejara la aptitud de cada candidato para regir la Unión Americana durante los próximos cuatro años, esto en tan solo 90 minutos. Todos deseaban esto, ¡pero no se esperaba que realmente fuera a pasar!

Trump demostró su habilidad para conservar la calma en situaciones donde lo atacan directamente; a su vez, Biden reveló su gran capacidad de mostrar ese carácter necesario para debatir y mostró la moral de la que tanto se caracteriza, además, mejoró por mucho, la fluidez que tanto le criticaron en el primer encuentro. Honestamente, quién sabe si este debate hizo que alguien considerara nuevamente su voto, o si aclaró totalmente a la población que están votando correctamente con base en sus ideales; eso, todavía no lo sabemos.

Algo es seguro, ambos cambiaron su estrategia para debatir, porque, pues… a nadie le gustó la porquería de disputa de la primera ocasión. De verdad que fue el desastre americano más grande del siglo, y no es por exagerar, pero, así es para los grandes estándares estadounidenses.


Eso sí, Trump, a pesar de haber mejorado su táctica de respuesta, siguió mintiendo; asegurando estrategias que no ha podido ni manejar en los cuatro años de su dirigencia presidencial.

“La vacuna ya está lista, el ejército la distribuirá”
“Hemos actuado tan bien, que otros países nos han felicitado por la forma en que hemos manejado a la pandemia”

Biden supo aprovechar el tema de la crisis sanitaria y sus impuestos, esto orilló a Trump a mantenerse a la defensiva. Ahora todo fue al revés, Biden atacó y Trump se defendió. Sin embargo, Trump también tuvo sus momentos brillantes, donde, al preguntar cosas como “¿y por qué no has actuado?, ¿por qué no lo has hecho durante tus 47 años de político?, ¿por qué no lo promoviste como vicepresidente?” y eso, dejó en cierto modo, indefenso al candidato demócrata, siendo una gran estrategia para contraatacar. La verdad es que habría que ver minuciosamente cómo es que el ex vicepresidente se desempeñó durante el periodo de gobierno de Obama.


Los temas de los niños migrantes separados de sus familias, los seguros médicos, y la pandemia claramente dejan indefenso a Trump, pues este solamente argumentó que tiene un gran plan para cada tema, pero que, “es secreto y no puede decírselo a nadie”. ¿Entonces, qué nos dice esto? ¡Qué no tiene nada, absolutamente nada! ¿Cómo es esto posible para un presidente, y sobretodo, del país más poderoso del mundo?


Es claro que, Trump es la imagen viva del individualismo pragmático, y Biden la de la moralidad, humanismo, y hasta me atrevo a decir, que del populismo (pero gracias a Dios, no como AMLO). Tuvimos un debate de hora y media con carácter, cuerpo, relevancia y orden. Por fin.


Unas encuestas mencionan que Trump fue quien ganó, otras, por supuesto, establecen a Biden como el triunfante de la noche. Es obvio que, para cada área poblacional, habrá un vencedor diferente, aunque eso no es lo que realmente importa. Porque, a pesar de que Biden tenga la delantera, no significa que ya tiene ganada la elección de este año. Quién sabe, igual y se repite lo que sucedió hace cuatro años, donde Clinton llevaba las encuestas a su favor, y Trump terminó siendo el triunfador… O, puede que esta vez sea verdad que Joe lleve una gran ventaja tanto en las encuestas, como en los votos.


¿Para ti, quién es el candidato más apto?, ¿qué le conviene más a México?

39 visualizaciones0 comentarios

Comments


bottom of page