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Andrea Dubois Rubio

La Carga Mental, sus Efectos y Cómo Deshacerse de Esta

La carga mental, se refiere al esfuerzo constante que hacemos para realizar algo y conseguir un resultado. Para esto se requiere un grado de atención, que influye en nuestros procesos cognitivos. Puede ir desde leer un libro, o escribir, hasta estar poniendo atención en clases, o llevar una lista mental de todas las tareas que tenemos que realizar para la semana.

 

Hay algunas tareas que requieren mayor grado de atención que otras, por ejemplo, el despertar, bañarse, hacer la cama, etc, son cosas que hacemos de manera diaria, que sabemos y podemos hacer de manera casi automática. Sin embargo, el prestar atención a la información que se nos está dando en clase, hacer tarea, leer, dibujar, etc, son tareas que requieren más atención. Sin importar el grado de atención necesario para realizarlo, esto es algo que se va acumulando a lo largo del día, y cuando no logramos relajarnos, y nos afecta de distintas maneras.

 

Esta ‘sobrecarga’ resulta en la fatiga mental, y se ven afectadas nuestras habilidades cognitivas, emocionales y sociales. Algunos efectos de esto son:

●      Falta de o disminución de la concentración y atención: Nos cuesta más trabajo poner atención a las tareas que tenemos que realizar, e igual nuestra concentración o ‘lapso de atención’ para realizar las tareas, disminuye de manera drástica

●      Rechazo al trabajo: Las tareas que tenemos que hacer a lo largo del día se vuelven más pesadas, por más sencillas que sean, comúnmente nos encontramos evitando hacer las mismas, por más importantes o urgentes que sean, ya que lo que nuestro organismo quiere es relajarse

●      Sentimientos de Culpa: Estos mismos se dan por el rechazo al trabajo, lo posponemos tanto, y lo procrastinamos demasiado, que lo terminamos haciendo al último momento (o en otros casos ni siquiera lo realizamos) que nos sentimos culpables de no haberlo realizado antes, cuando teníamos el tiempo.

●      Mayor Irritabilidad: Uno también se vuelve más irritable, ya que al sentir que trae ‘demasiadas cosas encima o en la cabeza’ el convivir con familia y amigos se puede llegar a ver como otra tarea que nos quita tiempo de realizar otras que llegamos a considerar que tienen ‘mayor importancia’.

 

Estos son algunos efectos de la carga mental, sin embargo, hay diferentes cosas que podemos hacer al final del día, y/o de manera periódica para evitar que esta se acumule y afecta nuestro rendimiento, algunas de estas actividades son:

●      Dormir lo suficiente: el dormir permite que nuestro cuerpo se recupere, recargamos nuestra energía y nuestro cerebro cumple con el divertido proceso para poder acomodar y almacenar la información que hemos recibido a lo largo del día.

●      Simplificar decisiones: El simplificar decisiones y tareas por los pasos que tienes que hacer para realizarlas puede ayudar a facilitar, ya que puedes ver cuantas cosas de verdad necesitan más energía que otras y priorizar

●      Priorizar tareas: Esto lo puedes hacer utilizando la matriz de eisenhower, de esta manera puedes organizarte y saber que tareas deberías de realizar primero y/o darles más importancia.

●      Practicar técnicas de relajación: Esto te puede ayudar a tener la mente más clara, igual a que tu cuerpo se tranquilice y se reduzca el nivel de estrés.

 

Estos son algunos de los efectos y técnicas que puedes llevar a cabo para no sufrir tanto de la carga mental. Hay que recordar hacer estos ejercicios de manera constante, e incluso intentar relajarse al final del día antes de irte a dormir, ya que así evitas que se acumule toda la información que tu cerebro tiene que procesar.

 

Referencias:

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