Por si no te enteraste, últimamente los temas creativos han sido el talón de Aquiles de las instituciones de gobierno en nuestro país. Comenzando con la polémica convocatoria de la SEP, hasta el fallido “logo” del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles.
En el primer caso, la Secretaría de Educación Pública publicó una convocatoria para que profesionales gráficos desarrollaran las portadas y contenidos visuales de los libros de texto, dicha situación indignó a miles de usuarios en redes sociales, pues la remuneración (si así puede llamarse) por participar en el concurso, consistía únicamente en exposición y una constancia de participación. Esto no solo trajo una ola de divertidos memes, sino que diversas asociaciones como Encuadre (Asociación Mexicana de Escuelas de Diseño Gráfico) y AMDI (Asociación Mexicana de Ilustradores) expresaron su descontento y rechazaron por completa la iniciativa de la SEP, enfatizando no estaban valorando y pagando el trabajo de los artistas como debería. Por otra parte, algunas empresas del gremio como Wacom aprovecharon la tendencia, creando un concurso para premiar a los memes más divertidos del tema.
Por otra parte, se publicó el logotipo del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles provocando en los usuarios de redes sociales desde indignación, risa y hasta ironía, pues el mismo tiene más errores que aciertos, a tal grado que pudo haberse diseñado mucho mejor con plantillas prediseñadas de aplicaciones como canva. Con una saturación de elementos que incluyen torres de control, aviones y hasta un mamut, causó furor, pues no es necesario tener “ojo de diseñador” para notar que no cumple su función. Por si fuera poco, se dio a conocer el presupuesto de este curioso proyecto fue de tan solo $3,000 pesos, incendiando aún mucho más la conversación en redes sociales.
Una vez contextualizados los tropiezos que fueron tendencia en redes sociales, cabe preguntarnos qué tienen en común estos dos temas. Para empezar, podemos resaltar que estas dos situaciones denotan un grave problema: el poco valor que se le da a los trabajos artísticos, no es ninguna sopresa que el trabajo creativo no se pague de la forma que debería, incluso entre los profesionales de estas áreas se suele bromear sobre la poca oferta laboral, los sueldos bajos y la precariedad que viven los trabajadores de esta industria. En este sentido, en México todo lo relacionado con cuestiones artísticas o creativas se tiene percibido como algo sin valor ni complejidad, y es realmente triste observar como incluso instituciones de gobierno malbaratan la profesión, ofreciendo pagos injustos o incluso pensar en la posibilidad que no es necesario un pago y que la exposición es más que suficiente como remuneración. El trabajo creativo cuesta, solo debemos pensar en el tiempo, dinero, formación y esfuerzo que las personas invierten. Entonces, por qué nos empeñamos en creer que no es así, que cualquier persona tomando un curso es capaz de crear lo que a un profesional le ha costado años aprender. El problema es tan grande que los egresados de licenciaturas como Diseño Gráfico perciben un sueldo de tan solo $7,000 al mes.
Como reflexión final de todo esto, puedo decirles que es nuestro deber como sociedad ayudar a que este tipo de profesiones sean valoradas como deben, y esto se puede hacer pagando como se debe. El cambio en la percepción de los trabajos artísticos está en el comportamiento del mercado, ese es el único camino para poder dar el valor que realmente necesita, muchas veces se piensa que es sencillo crear un logo que represente una marca o crear una ilustración bonita, pero va mucho más allá y es mucho más complejo, requiere investigación, análisis y desarrollo de ideas. Por eso, los invito a que si tienen un proyecto que necesite trabajo creativo, contraten a un profesional, si perteneces al gremio artístico y creativo, no des más barato tu trabajo o aceptes “exposición” como remuneración, esto puede abrir la posibilidad a no tener que rogar por un pago justo en el sector creativo.
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