¿Por qué últimamente ha sonado tanto el nombre de “Ruth Ginsburg” en todas las noticias?, ¿te percataste de esta constante repetición de la situación actual que involucra a esta mujer? Seamos honestos, ver las noticias constantemente nos puede provocar negatividad respecto a los eventos actuales, por lo cual, es común pasar desapercibido cualquier suceso relevante. Pero no te preocupes, voy a explicarte por qué la muerte de Ruth Ginsburg ha tenido un impacto fuerte en el sistema judicial de EE. UU. y por qué hace que el periodo electoral sea aún más interesante.
Esta mujer, la magistrada Ruth Bader Ginsburg fue un personaje brillante que luchó por la igualdad de derechos en todo aspecto. Falleciendo el 18 de septiembre del año en curso, puso en jaque al sistema judicial federal americano. Como si la pandemia del COVID-19, la crisis económica y los movimientos sociales no fueran suficientes, ahora, a unas cuantas semanas de las elecciones presidenciales de Estados Unidos, el debate se abre con gran emergencia para decidir cuándo y quién será quien reemplace a esta personalidad ejemplar. No será fácil encontrar un sustituto que maneje asuntos que siempre han sido polémicos, como el aborto, los derechos LGBT+, la regulación ambiental y etc., ya que ella era una progresista modelo.
Con las elecciones presidenciales de Estados Unidos pisándonos los talones, los Republicanos y los Demócratas han estado en constante disputa para resolver esta situación. Tiene que haber una votación y presentación de candidatos para cubrir este puesto, sin embargo, he aquí el gran problema que muestra el sistema judicial por disputas que se han creado debido al sistema político. Donald Trump, actual presidente de Estados Unidos, desea colocar a un juez lo más pronto posible; antes de las elecciones, pero que ÉL determine quién va a ser. El mandatario ya ha dado a conocer su lista donde nomina a 20 conservadores. En contraste, Joe Biden, candidato presidencial demócrata, defiende que la decisión final se debe tomar hasta después de las elecciones. Incluso el expresidente, Barack Obama ha hecho énfasis en respetar el proceso que alguna vez, los republicanos exigieron. En 2016, el líder de la mayoría conservadora del Senado, Mitch McConnell, se rehusó a cubrir la vacante de la Suprema Corte en el momento en el que el juez Antonin Scalia falleció. En ese periodo, faltaban 10 meses para las elecciones de ese mismo año. Así, Obama hace un hincapié para que los republicanos del Senado actual se adhieran al precedente que establecieron en ese año, negándose a hacer una votación para seleccionar al próximo juez de la Corte Suprema.
En una época donde la opinión pública y las acciones gubernamentales están más polarizadas que nunca, es preocupante saber que la lucha judicial siga percibiendo trabas por desacuerdos y conflictos políticos. Sobre todo, a causa de intereses personales. Es indiscutible la relevancia de este aspecto en el sistema judicial de Estados Unidos, pero, en el caso de que se llegue a elegir al sustituto hasta que pasen las votaciones, ¿qué escenario existiría si Trump obtiene su reelección? Definitivamente pondrá en el puesto a quien le convenga más para el partido Republicano, y que le favorezca a las decisiones inesperadas que suele tener; si esto llegara a suceder, muy seguramente se deshará de todo progreso que Ginsburg logró hacer durante su periodo como jueza de la Corte Suprema.
Aunque, los problemas logísticos que enfrenta el partido republicano realmente son más profundos de lo que quisieran. Los senadores republicanos tienen periodos de reelección que definitivamente no les favorecen, y desafiar el deseo de Ginsburg (de ser reemplazada en caso de fallecer hasta que se definieran las elecciones presidenciales) podría afectarlos más en este proceso electoral. Por esto, la disputa de elegir al próximo juez se convierte en una prioridad más para el sistema político americano, y al mismo tiempo pone en peligro los logros progresistas. La muerte de la juez realmente puede volver a encender aquellos debates electorales que han estado representados principalmente por la pandemia y la crisis económica resultante de esta. No obstante, será cuestión de tiempo ver qué tanta relevancia le aporta los medios y la sociedad americana a este suceso tan importante para su democracia.
Finalmente, etiqueto esta situación como un evento que, por desgracia, toma a ambos partidos políticos en posiciones desfavorables. Los republicanos están tan cerca de poder colocar un juez que promueva las reformas conservadoras, pero tan lejos de tener el dominio total de esta resolución. Muchos senadores conservadores no pueden cometer el error de hacer un paso en falso, debido a sus elecciones por estado; su popularidad es primordial para obtener los votos necesarios. Contrariamente, los demócratas aún necesitan mantener su liderazgo entre los votantes para poder obtener esa tan deseada elección presidencial, y poder colocar a otro juez progresista que continúe con el legado de Ginsburg. El partido demócrata necesita la confianza del electorado para poder seguir con los planes que mejoren las reformas fiscales, sociales, educacionales, de seguridad, y de salud también. No pueden bajar la guardia. Por el momento, los demócratas y los republicanos no tienen tendencias de favorecer a su contrincante y esto aún está por verse. Esperemos, que el juez futuramente elegido sepa ejercer sabiamente su profesión en favor de su pueblo.
Muy interesante para saber más de la situación de Estados Unidos y de todo lo que aporto Ruth Ginsburg, una gran mujer.
Excelente artículo. Definitivamente Estados Unidos se encuentra en un momento crítico. Ojalá que el juez futuramente elegido siga velando por el progreso en lugar de retroceder todos los avances que se han logrado
Excelente nota! Realmente Estados Unidos se encuentra en una situación muy importante y también crítica. Espero que el legado de Ruth Ginsburg perdure. Un verdadero ejemplo.
Una mujer muy inspiradora, ojalá haya más mujeres como ellas en el futuro.