Temidos por unos y amados por otros, los libros clásicos son un pequeño atajo para volver unos cuantos años atrás en el tiempo y descubrir un mundo tan interesante como el que hoy conocemos; recordando que los libros son maravillosos por el simple hecho de transportarte a mundos de fantasía, romance, terror y muchos más, y los clásicos no son la excepción.
Jane Austen, considerada una grandiosa escritora, nos maravilla con su novela romántica, Orgullo y prejuicio, en la que la historia de amor más emocionante se ve plasmada en una época en la que el nivel de las clases sociales estaba latente y las familias buscaban posicionar a sus hijas con un caballero de buen estatus.
Todo comienza en una familia de clase media, los Bennet, compuesta por un padre de carácter pasivo y cariñoso, una madre con demasiados sueños para sus hijas y una pasión por querer saber cada cosa que pasaba en su comunidad, dicho matrimonio tenía cinco hijas, Jane, Elizabeth, Lydia, Mary y Catheryn, cada una con distintas cualidades, sin embargo, esta historia se enfoca un poco más en Elizabeth, considerada con poca belleza pero con una inteligencia mordaz, es la protagonista de tan maravillosa obra de arte, que comienza con la llegada de cierto caballero rico a un baile muy especial, y su rechazo hacia la querida Elizabeth estalla la tan épica historia de amor entre Mtr. Darcy y Elizabeth Bennet cuyo odio es transformado en un amor tan complejo, inesperado y apasionante que no querrás terminar el libro.
El amor es fundamental para entender Orgullo y prejuicio, pero lo asombroso es que no sólo es romántico, durante su lectura, reirás, pensarás, odiarás y amarás cada instante que pases leyendo las palabras que con gracia y habilidad te llevan por una historia que al mismo tiempo refleja y cuenta de una manera sigilosa pero contundente la vida de cada una de las hermanas. ¿No es a caso este el objetivo de un buen libro? Transportarte a tan increíble paisaje de emociones y sensaciones que Orgullo y prejuicio te hacen sentir incluso terminando el libro, pues aún recordando lo leído percibes de nuevo cada emoción que experimentaste al leer.
Así que, te recomiendo agarrar el libro, ponerte en tu sitio favorito, con una buena bebida y tu snack favorito, por que ¡no querrás soltar Orgullo y prejuicio!
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