“Only if we understand, will we care. only if we care, will we help. only if we help, shall all be saved.” — J.G.
Teniendo en cuenta que estamos en la semana del “Día de la Tierra”, no hay mejor persona que represente la pasión por la maravillas que provee la Tierra como lo es Jane Goodall. Su nombre completo es Valerie Jane Morris-Goodall, nació en Londres, Inglaterra, con padres adinerados, su padre era piloto de carreras para Aston-Martin y su madre pasó de ser secretaria a escritora, por lo que la mayoría de su niñez, Jane fue cuidada por una niñera.
A la edad de 1 año recibió un regalo de su padre, y este era un juguete de un chimpancé bebé llamado Jubilee, que representaba el primer nacimiento de un chimpancé en cautividad en el zoológico de Londres; fue entonces ahí el despertar de Jane por los animales. Debido al trabajo de su padre se mudaban constantemente, pero Jane adonde quiera que fuera se interesaba por los animales, disfrutaba de explorar jardines y observaba la fauna que la rodeaba, cualquier animal que ella encontrase. A la edad de 5 años ocurrió una situación, a mi parecer muy divertida, Jane “desapareció” durante varias horas, tan desesperados estaban sus padres que tuvieron que iniciar una búsqueda, pero lo que no se esperaron fue encontrarla en el gallinero sentada observando a las gallinas. Ella quería saber como ponían los huevos, tanto que se sentó en frente de ellas a esperar a que sucediera y ver por sí misma como lo hacían. Y teniendo eso en cuenta, desde que tenía 8-9 años su sueño era vivir en África junto con los animales.
Su vida se vio interrumpida cuando vino la segunda guerra mundial, en donde el papá de Jane se unió al ejército y fue reclutado para ir a Francia, pero Jane, su mamá y su hermana menor se quedaron con su abuela en Inglaterra. A pesar de pasar por esta guerra, las bombas que oía, los apagones que presenciaba, el racionamiento de los alimentos y por supuesto la ausencia de su padre, Jane encontraba maneras de disfrutar lo que la vida en ese momento le presentaba. Esta situación hizo que hiciera más investigación en la naturaleza, coleccionaba caracoles y orugas, e igualmente tenía algunas mascotas como hamsters, lagartijas y un canario.
También desde que era pequeña le interesaba mucho la lectura en específico libros relacionados con animales como “Doctor Doolittle”, “The Jungle Book” & “Tarzan”. A la edad de 12 años, formó un club llamado “The Alligator Club” que era relacionado en torno a la naturaleza. Años después, Jane no encontraba ninguna satisfacción en atender a la escuela, le pesaba y no la hacía feliz pero seguía asistiendo, para casi el final de sus estudios básicos empezó a tomar Inglés y Biología que le dieron el impulso para seguir aprendiendo. Si bien pudo haber aplicado para una universidad, su familia no podría pagarla, por lo que Jane se enfocó en seguir leyendo libros sobre la naturaleza y soñaba en estar con la vida salvaje en África.
Ella quería convertirse en periodista, pero su madre le aconsejó que se buscará un título que le garantizara un empleo, por lo que se enlisto para ser secretaria y un año después se graduó y obtuvo varios trabajos administrativos, en la Universidad de Oxford, y en su tiempo libre también trabajaba para una empresa de cine documental, todo esto lo hacía para ahorrar un poco de dinero para su sueño de viajar a África.
A la edad de 23 años, una amiga de Jane la invita a Kenya, renunció a su empleo y se mudó a su pueblo natal para ahorrar dinero para el viaje. En ese mismo viaje le parece fascinante todo lo que ve en África y lo disfruta demasiado, incluso el conocer nuevas personas, personas como Louis Leakey, un antropólogo y paleontólogo, fue tan el impacto que tuvo Jane con Louis que este la contrató para ser su asistente. Para esto Leakey tenía planeado algo más grande para Jane, el creía que los humanos y los chimpancés compartían un ancestro común, por lo que él buscaba a alguien que no fuera académico y que no tuviera sus prejuicios sobre el tema, por ese motivo fue que eligió a Jane como la perfecta candidata ya que ella vería a los chimpancés con ojos nuevos y no solo por eso sino que él también pensaba que ella era la adecuada para soportar el aislamiento a largo plazo en la naturaleza. Aunque muchos se opusieron a que Leakey la eligiera ya que no tenía una formación científica “formal” y carecía de un título universitario, su decisión fue final hasta que en un estudio de chimpancés salvajes en el Lago Tanganica, las autoridades británicas se resisten a la idea de que una jovencita viva entre los animales salvajes en África, pero esa idea se disipa y acceden a que Jane viaje ya que su madre propuso acompañar a Jane los primeros 3 meses.
“A sense of calm came over me. more and more often i found myself thinking, this is where i belong. this is what i came into this world to do.” — J.G.
Llegaron a las orillas de la Reserva de Chimpancés del Arroyo de Gombe, en el oeste de Tanzania, el 14 de Julio de 1960, si bien al inicio no fue fácil el estudiar a los chimpancés, ya que huían de Jane, pero ella sabía que tenía que ser paciente, y así lo hizo hasta que los chimpancés aceptaron su presencia, sin embargo ella les otorgaba nombres a los chimpancés, pues veía una personalidad en cada uno de ellos. Durante estos encuentros, ella notó que el comportamiento de los chimpancés desafiaban las teorías que se encontraban en la época, empezando por la teoría de que los chimpancés eran herbívoros, que ella refutó con que son omnívoros, y no sólo eso sino también vio que los chimpancés fabrican y usan herramientas, que también tienen interacciones sociales complejas, y que necesitan de sesiones de aseo. Esta investigación trajo más cosas que solo la investigación de los chimpancés, trajo el cambio de idea de nuestro lugar como humanos en el orden natural, también fue un incentivo para que más mujeres se integrarán a la vida de la ciencia y más puertas se abrieran para ellas.
Después de esa y varias investigaciones más obtuvo su título académico, y un doctorado en la Universidad de Cambridge en etología. Con eso fue un gran impulso para que pudiera obtener financiamiento como investigadora independiente. Años después la realización de que la deforestación estaba afectando la vida salvaje, hizo que Jane se convirtiera en una activista defensora del desarrollo sostenible. Y no sólo eso, sino que también es defensora de la mejora de las condiciones y trato ético de los chimpancés cautivos utilizados para investigación, en donde algunos países ya se han unido a su movimiento.
Hoy en día Jane ya no hace trabajo de campo, pero su trabajo concientizando y recaudando dinero para proteger a los chimpancés sigue, ya que lamentablemente el problema que ha causado la deforestación es la disminución de chimpancés pasando de un millón a 200 mil ejemplares (o menos), todos los días es un buen día para hacer concientización sobre nuestro consumo, ya que algunas de las principales razones por la cual la deforestación se hace es para que nuestra población siga acaparando terrenos para tener más espacio para más habitantes y para el cultivo.
Si pueden les recomiendo ver su documental JANE.
Yorumlar