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Sororidad

"Es una hermandad como la de las monjas, pero no de las que se casan con Dios sino consigo mismas y con sus hermanas" Grabiel Wiener.

Recuerdo la primera vez que me encontré con esta palabra, pensé que habían escrito de forma incorrecta solidaridad. A pesar de que, en definición ambas palabras sean un poco parecidas, el término sororidad va mucho más allá del apoyo entre mujeres, es un acto de rebeldía contra el patriarcado que durante tanto tiempo se ha empeñado en mantenernos separadas; pero antes de explicar a profundidad la raíz de esta rivalidad entre mujeres, me gustaría hablar primero sobre el origen de la palabra sororidad.



Origen

El término sororidad proviene de la palabra inglesa sisterhood, la cual fue propuesta en los años setenta por Kate Millet, autora de“Política sexual”, con el fin de conceptualizar la unión social entre mujeres que dejan de lado sus diferencias y en cambio ven sus semejanzas, a través de las cuales se dan cuenta de la opresión que sufren por parte del patriarcado.


La traducción al español se realizó agregando el término latín soror que significa hermana. Fue la antropóloga mexicana Marcela Lagarde quien se encargó de delimitar y definir el concepto como “…una amistad entre mujeres que se convierten en cómplices para trabajar juntas. Un compromiso para conseguir logros sintiéndose libres y fuertes juntas.” (2018). Aunque cabe aclarar que, esta unión o amistad entre mujeres no debe llevarse a cabo sin excepciones, es decir no solamente porque una acción o comentario sea hecho o dicho significa que automáticamente sea correcto.


“El peor enemigo de una mujer, es otra mujer”

Todas hemos escuchado por lo menos una vez esta frase o la hemos puesto en práctica. Díganme, ¿cuántas veces no criticamos a una compañera de escuela por su forma de vestir o de actuar? Esta rivalidad incluso podría llegar a ser percibida como algo característico del género femenino y por lo tanto algo natural, aunque, las mujeres en realidad no tenemos ningún tipo de gen que nos predetermine a hacer menos a la otra, esto fue algo impuesto desde hace muchos años atrás, por lo cual es una programación más mental que biológica.


En épocas pasadas, la forma más viable para las mujeres de abrirse paso en el mundo era casarse con un hombre, debido a que nosotras como mujeres no podíamos ser consideradas como seres independientes que pueden valerse por sí mismas (además de que muchas veces no tenían la oportunidad de trabajar). Por esta razón, buscábamos la manera de llamar la atención del “mejor hombre” a través de nuestra apariencia física, siempre aspirando a la perfección. Nos considerábamos como objetos y estábamos constantemente en competencia con nuestro propio género para que un hombre se fijara en nosotras y así poder tener una mejor calidad de vida o mantener la que ya teníamos. Es así que la raíz de esta rivalidad no es una cuestión superficial sino de supervivencia, de esta forma se explica la programación que hemos tenido de siglos y siglos.


Por esta razón el acabar con estas actitudes dañinas entre nosotras y decidir ser sorora con todas nuestras compañeras, se vuelve en un acto de amor propio, ya que dejas de depositar tu valor en la aprobación masculina y antes de pensar en lo que te hace diferente de las demás piensas en lo que te une a ellas, las cosas que tienen en un común. Es así como la sororidad se torna en una transformación que inicia en nosotras mismas para romper el ciclo vicioso del patriarcado de mantenernos separadas y con ello, oprimidas.


De esta forma el practicar la sororidad se vuelve parte esencial de la lucha feminista, ya que, nos volvemos aliadas en vez de enemigas, dejamos de culpabilizar a las mujeres que han sufrido abuso o acoso para hacerles saber que no fue su culpa y para alzar la voz por ellas y todas las demás. Porque juntas somos más fuertes.







Referencias:

De Grado, L. (2019). Sororidad, la alianza entre mujeres que lo cambia todo. Recuperado de: https://www.efeminista.com/sororidad-mujeres/


Lagarde, M. (2012). El feminismo en mi vida. Recuperado de: http://www.mujeresenred.net/IMG/pdf/ElFeminismoenmiVida.pdf


Pensamiento Civil. (2018). SORORIDAD: EL VERDADERO FEMINISMO (el valor de la alianza entre las mujeres. Recuperado de: https://www.pensamientocivil.com.ar/3530-sororidad-verdadero-feminismo-valor-alianza-entre-mujeres

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